jueves, 29 de octubre de 2009

Escribiendo con ... Elsa.


He recreado la tarde después de nuestras voces,

del mundo y sus remiendos, de sus idas y venidas

y la desesperanza.

He escuchado su silencio, entero, inmenso,

velado por las hojas que crujen bajo mis pies.

He creído ver en sus pupilas una luna naciente,

corona de plata en mi horizonte gris.

Y en la calma,

he borrado, de la tarde, nuestras voces,

el mundo y sus remiendos, las idas y venidas,

para sentir la quietud de este otoño que amanece

y susurra, entre amarillos, la esperanza.



ELSA


La habitación ha quedado en silencio después de intercambiar nuestras opiniones en la sobremesa, mientras el aroma del café iba impregnando nuestros sentidos. Creo que todos nos hemos quedado reflexionando en las palabras dichas, en esas palabras cargadas, ora de desaliento, ora de esperanza…

Me he levantado y mis pasos se han dirigido hacia el ventanal desde el que veo caer la tarde. Lo abro… las hojas de los árboles van cayendo lentamente, empujadas por el viento que ha hecho su aparición meciendo las ramas.

Mis ojos miran hacia la lejanía … ¿miran o se pierden en el horizonte sin mirar?... Necesito entrar en contacto con mi alma, con ese mundo tan mío, tan íntimo, en el que nadie puede entrar, en el que tejo y destejo mis ilusiones.

El viento acaricia mi rostro, la tarde sigue cayendo dulcemente, y en mi alma… solo dejo paso a la esperanza…


Malena

viernes, 23 de octubre de 2009

Algo así como una carta.


Me pediste que no te hiciera ningún regalo material, que no lo necesitabas. Que preferías algo en lo que no tuviera que gastarme dinero pero que fuera importante, algo así como una carta.

Te comprendo porque no hay nada más valioso que regalar unos sentimientos, esos que aunque ya se dan por sabidos, necesitas oir o leer para sentirte mejor, porque a veces nos los callamos como por vergüenza, cuando en realidad deberíamos decir siempre lo que nuestro corazón siente.

Y aquí está mi regalo de cumpleaños.¿Qué puedo decirte?.Que aunque a veces no estemos de acuerdo, siempre acabamos buscando la vía intermedia que nos haga reconciliarnos.

Que aunque no quieras creerlo, siento un orgullo muy grande cuando te miro sin darte tú cuenta. Porque eres luchador, porque no tiras la toalla, porque eres serio y formal en tus apreciaciones, porque tienes los pies en el suelo aunque tu alma vuele muchas veces saboreando la belleza y la bondad de las cosas.

Porque sabes valorar a las personas y estar al lado de los que sufren compartiendo su dolor, porque eres pacificador, porque eres generoso, porque nunca te pones por encima de los demás, porque eres la persona en quien uno se puede apoyar cuando las cosas van mal.

Porque sé que cuando me vaya de este mundo, habré dejado algo muy valioso en él:Tú.

¡Feliz cumpleaños, hijo mío!

Te quiere,

Tu madre.


(21/10/09)

domingo, 18 de octubre de 2009

Siguiendo tus pasos.


Camino lentamente, no por cansancio sino porque quiero dejar grabado en mis retinas todo lo que durante tantos años ha formado parte de mi pequeño mundo y que hasta ahora no me había dado cuenta de lo importantes que eran en mi vida.

Acaricio los pétalos de estas rosas que están naciendo, como queriendo regalarme sus bellos colores. Miro los peces de colores que nadan en el estanque siguiendo la estela de los anteriores.

El sol envía sus rayos que caen sobre las escamas de uno de ellos que ha querido sacar su cabeza, quizás para contemplar como es el mundo exterior tan diferente del acuático al que está acostumbrado.

Los bancos de madera parecen estar esperando a las personas que un día tras otro le vienen a hacer compañía y le cuentan como va transcurriendo la vida. Y yo lo observo todo pero sabiendo, porque mi alma me lo dice con dolor y esperanza, que no volveré a verlos en mucho tiempo.

No ha sido fácil tomar la decisión, sobre todo cuando tantas cosas me tienen atada con cuerdas hechas de sueños que un día sin saber el por qué se truncaron. Sueños rotos, esperanzas rotas, vidrios que piso con mis pies desnudos y de los que ya no sale sangre.

Demasiada soledad en mi vida, hasta que un día los dioses apiadados de mí te pusieron en mi camino cambiando por completo el mundo en el que me había sumergido.

Sentí otra vez el calor del sol y las flores se abrieron de nuevo. Miré en las noches silenciosas a la luna, veía en ella tu rostro y te llamaba acariciando tu nombre como una oración.

Las mariposas volaban sin cesar en mi estómago y saltaban de gozo cuando al sonar el teléfono, era tu voz la que se escuchaba al otro lado del auricular.

Los sueños fueron tejiendo hermosos lienzos y antes de nuestras citas todo mi ser ansiaba tus besos y tus caricias. Pude oir la más bella melodía cuando estaba entre tus brazos y miles de estrellas se encendían cuando nuestros cuerpos se juntaban.

Por eso hoy me estoy despidiendo de esta forma de vida que hasta hoy había sido mía. Sé lo que dejo atrás pero también sé que ha llegado el momento de que se cumplan nuestros sueños, porque hoy...voy a tu lado para siempre.

Malena

(Dedicado a mi gran amiga Patricia Gold con todo mi cariño)

lunes, 12 de octubre de 2009

A propósito de la comunicación


No sé como empezar pues no me es fácil expresar los pensamientos que salen con timidez y pudor pero que quiero compartir con vosotros.

Me he sentido feliz con vuestros cariñosos comentarios en el anterior post. La verdad es que necesitaba íntimamente sentirme arropada después de escribirlo y no me han faltado esos besos y abrazos que generosamente me habeis entregado.

Pero para mí, lo más importante ha sido la comunicación que se estableció. Tengo que confesar que cuando os dejo un comentario, vuelvo para ver si habeis dejado unas palabras para mí porque hay veces que se siente la necesidad de que haya comunicación, de saber que te han leido y que te contestan.

Sé que los blogs son para escribir nuestros sentimientos, nuestros pensamientos, en forma de relatos, poemas o reflexiones y para que la persona que los lea, si le ha gustado y quiere, deje su comentario pero yo necesito una mayor comunicación.

Sé también que esto no es políticamente correcto pero vuelvo a las andadas como hice en su tiempo, que vosotros me comentábais y yo os respondía. ¿Qué por qué dejé de hacerlo? pues porque pensaba que nadie tendría ganas de volver a por una respuesta y a lo mejor no me equivoco.

Ya sé que hay comentarios que no necesitan ninguna(respuesta) pero aunque nadie vuelva, yo seguiré respondiendo para que sepais que este pequeño Tintero de China, estará siempre abierto a todo el mundo aunque solo sea para dejaros un fuerte abrazo.

Gracias.

Malena

lunes, 5 de octubre de 2009

Como hacerte comprender...


¿Qué palabras debo de utilizar para que me entiendas?

¿Cómo puedo llegar hasta tu corazón para que sepas que no te miento?

De qué manera puedo explicarte que...

detrás de esas nubes grises está el sol, que caminando vas haciendo tu propio camino, que las fuerzas residen en tí y eres capaz de derrotar al desaliento.

Que eres libre de llorar porque las lágrimas desahogan el alma, que aunque bajes un escalón antes habrás subido dos, que te mires en el espejo y verás que hay una gran persona que sufre pero con una gran capacidad de amar.

Que en silencio sigo tus pasos desde lejos para no molestar y que cada día al llegar la noche, de mis labios sale una oración por tí...

Ave María...

Malena

jueves, 1 de octubre de 2009

¡Que suerte ser rana!


No es normal que alguien se deje un libro abierto con un bolígrafo señalando la página, al menos, eso pensé aquella tarde en que decidí caminar por el Paseo Marítimo, intentando aliviar la pesadez de cabeza con la que me había obsequiado el día.

Como decía, aquel libro parecía haber sido abandonado por su dueño debido a algún suceso repentino que le hizo olvidarse de él. El banco estaba vacío. Miré a mi alrededor pero solo habían parejas paseando tranquilamente, aprovechando los últimos rayos del sol.

La curiosidad pudo más que la prudencia y tomé el libro entre mis manos cuando, de repente, cayó al suelo una hoja doblada en la que se habían escrito algunas palabras. ¿Es ético leer lo que alguien había escrito quizá en un momento de intimidad? En aquellos momentos, decidí que tenía permiso para hacerlo y, sentándome en el banco, inicié la lectura de algo que sin querer tocó mi corazón.

...................

"Arrullada por las olas del mar y perdida mi vista en el horizonte, ha llegado hasta mí tu imagen, pero he sentido dentro de mí que ya no me hace daño, que puedo observarla de forma indiferente como nunca pensé que podría hacerlo.

Ahora, desde la distancia que me otorga el tiempo, y sin la venda que cubría mis ojos, puedo mirar la película en que se convirtió mi vida.

Fui manipulada, aunque es verdad que yo me dejé manipular, convirtiéndome en la princesa de un hermoso cuento de hadas hasta que una vez utilizada, quisiste escribir el cuento al revés, y con un beso convertirme en una pequeña rana, pero no te diste cuenta de que las ranas saltan y escapan a toda velocidad, sobre todo, cuando te das cuenta de que el príncipe escribió su propia película con un único guión, que repetía textualmente hasta la saciedad, variando solo la protagonista.

¿Mereció la pena? ¿Valieron los sueños para algo? No. A cada pregunta contesto que no. Si puedo sacar algo positivo de aquella relación es haber aprendido que existen personas como tú: cartón piedra rodeado por un aura que pintaste de bellos colores para atraer a tus presas.

El sonido de las olas sigue arrullándome y respiro profundamente. Tomo en mi mano tu imagen y soplo sobre ella. Hacia el horizonte va, difuminándose, el rostro de un fantasma..."

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Doblo otra vez el papel y lo introduzco dentro del libro. Lo dejo en el mismo lugar en que lo encontré y sigo mi paseo mientras el sol es apenas una pequeña bola naranja perdiéndose en el horizonte. Solo una frase se repite en mi mente: ¡Qué suerte ser rana!