martes, 15 de marzo de 2011

Japón.


Toca.
La melodía del no ser.
Nueve cumbres se derrumban.
Ocho océanos se secan.

Zosán Junku.

Mis queridos compañeros y amigos:
El Tintero de China no puede permanecer en silencio en estos momentos trágicos para el pueblo japonés y se solidariza con él y desea que la ayuda de todo tipo llegue pronto a socorrerlos.

Mil besos y mil rosas.

Malena

lunes, 24 de enero de 2011

Amanece en el bosque (De mi libro: "El Viejo Roble")



Amanece en el bosque. El sol envía sus primeros rayos al viejo árbol para darle los buenos días y éste a su vez mueve sus raíces desperezándose y avisando al duende de que comienza un nuevo día de trabajo. Se frota los ojos y después de hacer sus abluciones en el pequeño riachuelo que baja de las montañas, estira su chaquetilla y dando un giro sobre sí mismo, coge su pluma de ave y su libreta y continúa con el inventario que parece no acabar nunca.


Cuenta las nuevas hojas que le han salido al joven roble y comprueba subiéndose a él con gran esfuerzo, si las ardillas continúan utilizándolo como alojamiento.


Tres nuevas mariposas han entrado. Sus colores denotan su procedencia. Seguro que se han escapado de la escuela que linda con el bosque. Habrá que hacerlas volver, pero dejémoslas que disfruten de su escapada.


El viejo árbol piensa y sonríe. Las hojas que cayeron de los árboles tienen todavía el rocío matutino y el sol al iluminarlas las hace brillar con irisaciones que a él le traen dulces recuerdos.


Abrazos, caricias que le hacen temblar de emoción. Aún late su corazón cuando piensa en su pequeña hada. Aún la ama como si fuera el primer día y ella le corresponde con un amor sin límites. Se posa en sus ramas un ave de suaves colores y le pregunta si sabe cuándo será luna llena. Tres días y volverán a unirse. Tendrá que acicalarse para Ella. ¿Para Ella? No. Para ellas. ¿Qué secreto guarda el viejo árbol que no ha desvelado?


Los animales del bosque han comenzado su rutina diaria. Las mamás llevan a sus crías a recorrer el bosque. La mamá Doña Pata lleva a sus hijos al pequeño lago. Empiezan las clases de buceo. Meten la cabeza bajo el agua y la sacan corriendo con gran estrépito.


Las ardillas llevan en sus manos provisiones, mientras una larga fila de hormigas camina cargadas hacia el hormiguero.


Y el duende sigue con su inventario y escribe: Cuatro conejos blancos en la madriguera que está al lado de la roca grande. Han salido setas en medio del claro. Y sigue con su trabajo.


El día continúa su curso. El sol está en su cenit. Se oye el rumor de las aguas cayendo entre las rocas y el canto de todo el coro de aves que han invadido las ramas de los árboles.


Y allí abajo, un viejo árbol, va contando con sus ramas: Una, dos, tres noches... entorna los ojos y alrededor, continúa la vida en el bosque...

domingo, 16 de enero de 2011

A propósito de la vida efímera. Reflexión.




Creo que hay unos versos que quiero intentar recordar y no puedo, que decían algo así como: "Puede ser más fría esta noche". No lo sé ni tampoco me preocupa porque mis sentimientos esta noche están un poco trastornados.

No es fácil decir adiós a una persona y más si es de tu familia y te abandona para siempre pero no es fácil no sólo por el hecho de que no la volverás a ver sino porque pone ante tus ojos la palabra"despedida" por no decir "muerte".

Vives apurando los días como aquel que se bebe una copa de vino olvidando que un día tienes que marchar y dejar todo atrás: marido, hijos, quizá nietos y te planteas lo efímera que es la vida y que no tiene ningún sentido enfadarte por cosas nimias.

Que debes vivir intensamente y amar lo que tienes a tu alrededor y que forma tu pequeño mundo. Y que debes de agradecer todo lo que te ha dado la vida porque aunque algunas cosas no hayan sido demasiado buenas, te han servido para valorar más lo que tienes.

No quiero complicar mis días. Quiero amar y sentirme amada por mi marido y por mis hijos y el día que me tenga que ir, lo haré llevando en mi corazón el agradecimiento por tanto cariño recibido y entregado.

(In memoriam).

Malena

jueves, 13 de enero de 2011

En una gota de lluvia...




¿Quién dijo que en una gota de lluvia no hay vida? La tomo en mi mano. Tan pequeña, tan delicada, tan espejo de lo que refleja y mi mirada y mi corazón entran suavemente en ella.

Hay colores que se mezclan, recuerdos de lugares por los que pasó, cuando era parte de una nube que surcaba los cielos como un pequeño bajel, observando lo que en nuestro mundo pasaba.

Y recogió el azul del mar, el blanco de las margaritas, el amarillo de los girasoles, la sonrisa del niño, las caricias de una madre... La luz del atardecer cuando el sol se escondía tras las montañas, la ternura de tu corazón cuando entre tus brazos me amabas...

¿Quién dijo que no había vida en una gota de agua?


Malena

lunes, 3 de enero de 2011

Noche de Reyes



Mis queridos amigos y compañeros: Que la estrella que guió a los Reyes Magos de Oriente os alumbre siempre el camino hacia la felicidad.

Feliz Noche de Reyes.

Mil besos y mil rosas.